El Papa Juan Pablo II creó, el 5 de octubre de 1990, la nueva Eparquía Maronita de San Charbel y nombró como primer Obispo titular de la misma al P. Charbel Merhi, misionero libanés que ha sido, durante seis años, superior de la Misión Libanesa Maronita. Actualmente el Obispo reside, en San Marón, en Buenos Aires y coordina las actividades de las cuatro Parroquias maronitas que hasta el presente conforman el cuadro pastoral de la Eparquía. La jurisdicción del Obispo se extiende a los aproximadamente 700.000 fieles maronitas, residentes en la República Argentina y en las Malvinas y actúa siempre como servidor de la Iglesia Maronita, apóstol del Líbano y sacerdote de Cristo.

Histórico de  la Parroquia del Smo. Calvario y Nra. Señora del Líbano

Dos padres de la Orden Maronita Mariamita, P. Simon Fahed y Manuel Ashkar vinieron a la Argentina para pedir ayuda solidaria a sus hermanos en el Líbano, que habían sufrido los desgastes de la primera guerra mundial. El primero volvió al Líbano llevando lo que la generosidad de los patriotas libaneses habían destinado para la ayuda de sus hermanos en la patria madre y el segundo, P. Manuel Achkar se quedó en la Argentina con el objetivo de fundar una Misión,  a servicio de los  libaneses y maronitas dispersos en la Provincia de Buenos Aires. En 1920, dicho sacerdote   comenzó la obra y en el año 1932 puso la piedra fundamental de la Iglesia y de la Escuela de Nra. Sra del Líbano, en la localidad de Villa Lynch del Partido de San Martín, poco poblada en aquella época. Con mucho sacrificio y abnegación y gracias a la ayuda de los miembros de la colectividad libanesa consiguió realizar sus metas y construyó un hermoso templo  dedicado al Santísimo Calvario y a Nra. Sra. Del Líbano, célebre por su riqueza artística, cuyo techo y paredes son cubiertos de lindas  pinturas al óleo  que narran la obra de la Creación y la historia de la Salvación, constituyendo un patrimonio cultural de mucho valor. Al lado del templo se elevó también un colegio primario y secundario. Al Padre Manuel Ashkar le sucedió el P: Luis Kobaiter que dirigió la labor parroquial durante 40 años y sigue todavía en actividad velando por la continuidad de la obra, ayudado por dos jóvenes sacerdotes, el P. Francisco Nasr y Rogerio Yusef Rajeha, todos  dedicando sus esfuerzos para el servicio generoso a los vecinos.

Histórico de la Parroquia de San Juan Marón

A final del siglo XIX y al principio del XX, la emigración libanesa,  con mayoría maronita en Mendoza, se intensificó, lo que llevó a un sacerdote maronita, el Pbro. Juan Aoun,   a procurar servir espiritualmente a su comunidad. Alquiló primero una residencia para un colegio y en 1920 compró un viejo hotel y lo transformó en escuela, separando una sala para Capilla. Organizó actividades juveniles,  formó un coro y fundó la Cofradía de la Inmaculada Concepción, con la finalidad de asegurar el servicio religioso a la comunidad. Antes de su muerte transfirió la propiedad de la escuela a la Sociedad Libanesa de Mendoza y en 1934 su sobrino, el P. Elías le sucedió en este servicio abnegado.  A pedido de los miembros de la Sociedad libanesa, en 1952  la Orden Libanesa Maronita envió dos monjes, el P. Ignacio Jachan y P. Daniel Rizk para cubrir las necesidades espirituales de los fieles. Terminada la misión exitosa de estos monjes, les sucedió el P. Luis Sammun quien trabajó incansablemente y con muchos sacrificios para terminar la construcción en 1967 de la actual Iglesia de San Juan Marón, sacrificando la escuela. En 1962 la Iglesia fue erigida como parroquia de los maronitas y orientales católicos. En 1990 se intentó renovar la escuela al lado de la Iglesia y funcionó algunos años hasta  que  la Autoridad de la Orden Libanesa decidió cerrar su misión en Mendoza, lo que llevó el actual obispo a entregar la  parroquia en 1997 al Pbro. P. Mauricio Elías que está continuando con intenso fervor apostólico la obra de sus antecesores.    

Histórico de la Parroquia de San Marón y Sr. Del Milagro:

La comunidad maronita de Tucumán tuvo  su Iglesia de San Marón en 1916, cuando el Padre maronita libanés, Yusef Chaia, movido por su celo sacerdotal, solicitó al obispo local el terreno donde estaba un santuario consagrado al culto del Señor del Milagro para construir un templo dedicado a San Marón.. El Obispo donó el terreno con la condición de conservar el nombre del santuario y bendijo en 1918 la piedra fundamental de la nueva Iglesia que fue inaugurada en 1924 con el título de Iglesia del Señor del Milagro y San Marón. Varios  sacerdotes se sucedieron al servicio de los maronitas de Tucumán  hasta 1960. En el mismo año, a pedido de la Santa Sede, la Orden Libanesa Maronita envió a Tucumán dos monjes, el P. Pedro Kerbaj y Moubarak Saleme para continuar la obra del P. Chaia. En 1962 la Iglesia fue reconocida como parroquia especial para todos los maronitas y católicos orientales de Tucumán. Debido a criterios de orden monacal, la Autoridad de la Orden Libanesa Maronita decidió en 1997 cerrar su Misión en Tucumán y entregó la Parroquia al Obispo maronita actual quien encomendó la dirección de la misma al Pbro. Domingo Atonur, sucediendo al monje P. Moubarak Saleme, abnegado pastor del rebaño maronita tucumano.

Alegría y compromiso de la Eparquía

El obispo de la Eparquía San Charbel de los Maronitas, quiere manifestar su inmensa alegría en estos momentos tan gratos que estamos viviendo, en el inicio de este siglo. El 17 de marzo de 1991  tuvo lugar  su Entronización Canónica como primer obispo, en una solemne ceremonia realizada en la Basílica del Santísimo Sacramento con la presencia de venerables autoridades eclesiásticas y civiles y una multitudinaria  participación de la feligresía. En su primera Carta Pastoral dirigida a su grey, en octubre de 1991, entre varios  puntos de los planes que buscaba el obispo, quería señalar los dos primeros:

Su inquietud prioritaria era la construcción de la Iglesia que sería la Catedral que congregaría a todos los maronitas en Argentina. Esta obra acaba de ser realizada  y es motivo para elevar hacia Dios una oración de acción de gracias porque  a El solo se debe el éxito de la construcción del Templo “si Dios no construye la casa en vano trabajan los constructores”  Recordemos cuantas veces se intentó la construcción de la   Iglesia de San Marón  y cada vez  surgían serios obstáculos que  frustraban los planes de la construcción. Cuando el plan de la  Providencia  Divina se puso en marcha, todas las graves dificultades desaparecieron y hoy ya tenemos una  majestuosa Casa de Dios. Gracias al Señor por su bondad gracias a los  hermanos  Misioneros Libaneses que ejecutaron el plan de Dios, gracias a los constructores, obreros y dirigentes,  por cuyo su sudor, maestría y profesionalismo se  levantaron las paredes y se cerró el techo y quedó listo el altar del sacrificio. Gracias a todos los colaboradores por cuyo  apoyo material  y moral se pudo llegar a un buen fin.

La  segunda meta del obispo era la adquisición de la sede propia que sería el corral que cobija a pastor y ovejas. Este es el desafío que vamos a  enfrentar, este es el compromiso que vamos a asumir. Como Dios ya tiene su casa así también el Obispo tendrá  su obispado. Pongamos nuestra confianza en la Providencia y manos a la obra. Nos acompañan en este camino San Charbel y Nra. Sra. Del Líbano, patronos de la Eparquía y también la nueva Santa Rafka, en sus manos depositamos nuestra confianza y a sus cuidados  confiamos nuestra inquietud.

+ Charbel Merhi  
Servidor de los Maronitas  en Argentina
E-mail : mcharbel@hotmail.com           

Tronador 1464
(1427) Buenos Aires - Argentina
Tel: (54-11) 4552-0380

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